Un curso es una fuente de información y formación muy específica sobre un tema muy preciso.
Este curso "Respuesta educativa para el alumnado con TDAH (déficit de atención e hiperactividad)" ha tratado sobre todos los aspectos del TDAH. Ha sido un curso formativo, además de muy divulgativo.
El TDAH, un síndrome muy estudiado a nivel científico, es aún un gran desconocido en la realidad escolar diaria. La mayoría de padres y profesores más o menos saben en qué consiste. Sin embargo, pocos saben enfrentarse a ello. En este sentido, este curso ha aportado muchas respuestas a muchos interrogantes y ha permitido a sus participantes elaborar una serie de materiales que, en su conjunto, constituyen un auténtico protocolo de atención al alumnado con TDAH.
Todo esto hace que este curso haya sido muy enriquecedor, y que haya contribuido a abordar un tema demasiado presente en nuestras aulas y demasiado complejo de tratar.
Sin embargo, esta labor formativa no ha estado exenta de dificultades. Ha habido que familiarizarse con una plataforma en un principio difícil de manejar, ha habido que aprender a manejar diferentes herramientas TIC tales como Twitter y distintas plataformas interactivas, y ha habido que combinar el tiempo de dedicación a las tareas de este curso con las obligaciones laborales. Esto último a veces ha sido complementario, y otras no.
Sin duda alguna la principal dificultad ha radicado, en mi caso, en la gestión del tiempo, debido al propio calendario de trabajo. Ello ha llevado a cosechar un fracaso, como fue el no poder entregar a tiempo la Unidad Didáctica normal y la adaptada para su valoración y evaluación por parte de l@s compañer@s del curso. Afortunadamente, se tuvo la oportunidad de presentar una actividad alternativa.
No obstante, se puede decir que, en mi caso, hay un antes y un después de este curso, en la medida en que la competencia adquirida es considerable. Concretamente, se ha aprendido a reconocer convenientemente a un alumno con actitudes propias de un TDAH, lo cual ha conllevado el organizar todo un protocolo personalizado de atención al alumno en cuestión a partir de sus actitudes y aptitudes. Se ha aprendido a reflexionar sobre las implicaciones del TDAH, y a aportar las soluciones pertinentes. Y lo principal, se ha aprendido a elaborar una serie de materiales protocolarios y curriculares pensando en casos concretos de alumnado con TDAH presentes en nuestras aulas, alumnos con nombres y apellidos. A partir de este momento, se ha empezado a ver el TDAH con unos ojos más humanos y más comprensivos.
Este último aspecto hace que este curso haya estado repleto de humanidad y de comprensión, desde los distintos apartados tratados hasta la propia atención dispensada por el tutor de nuestro grupo (Grupo C), D. Luis López-Cano Aguado. Esta combinación de gran disposición, humanidad, gran profesionalidad y paciencia del tutor y profundidad de los materiales facilitados ha dado como resultado una actividad completa y fácil de llevar, a pesar de las dificultades arriba mencionadas.
Finalmente, cabe afirmar que este curso ha conseguido el resultado más esperado, a saber, aplicar los conocimientos y competencias adquiridos en un futuro programa de atención al alumnado con TDAH del centro educativo en el que estoy destinado, programa en el que se procurará involucrar a todos los actores afectados: Equipo Directivo, Departamento de Orientación, alumnado y padres/madres, cada cual en el ámbito que le compita.